Ven con nosotros a la tierra de Papá Noel. ¿Se puede visitar a Papá Noel durante las vacaciones? ¡Por supuesto! Especialmente cuando se dispone de su invitación personal. Así es el extraordinario viaje de la Casa Pequeña y su nueva familia a Laponia. Son las vacaciones, comemos frambuesas dulces y unas horas más tarde aterrizamos en la tierra nevada de Papá Noel. Los renos tiran del trineo como locos y Papá Noel y los Elfos encantan a cada visitante con su hospitalidad. Su hijo aprenderá que: - vale la pena tener sueños, - cada viaje tiene un gran valor, - el aeropuerto es un lugar interesante, - volar en avión es seguro, - la creatividad es posible en diversas áreas. Y como cada historia sobre la Casa Pequeña, ésta también muestra que la diversidad entre nosotros es un valor extraordinario. Cada uno de nosotros, independientemente de quiénes somos, de dónde venimos y qué valores profesamos, tenemos derecho a ser amados, aceptados y apoyados. Cada uno de nosotros puede ser una Casa Pequeña que se destaque entre su familia humana y sus amigos del bosque. ¿Quizás su hijo es un poco diferente porque no quiere jugar al fútbol o no le gusta el helado y el jugo de naranja? Así es la Casa Pequeña, un poco diferente a sus seres queridos, pero maravillosa, sabia y querida por todos. Hay una sorpresa al final: un LIBRO PARA COLOREAR y deseos navideños para mis Lectores Maravillosos.