Girona, año 1381. La ciudad prospera entre la industria del pergamino, el comercio de lana, el tránsito de mercaderes y el rumor constante de la política que se teje entre los reinos de la Corona de Aragón. Tras la muerte de su maestro, el venerado escriba e ilustrador Arnau de Foix, la joven cartógrafa Meritxell de Torroella hereda un misterioso pergamino iluminado cuya procedencia y propósito trascienden cualquier obra académica. El pergamino contiene miniaturas extraordinarias: una torre partida, una vela negra sobre un mar turbio, un puente que no existe en ningún mapa conocido y escudos heráldicos dispuestos como palabras mudas. Arnau dedicó su vida a ocultar en la piel y la tinta un mensaje cifrado capaz de influir en el equilibrio de poder entre Aragón, Francia e Italia. Meritxell, formada en la precisión del trazo y la lógica de los códigos, se convierte sin desearlo en la última guardiana de aquel legado. La investigación la arrastra a mercados nocturnos donde los rumores valen más que el oro, a bibliotecas monásticas donde el silencio esconde alianzas y traiciones, y a fortalezas subterráneas conectadas por túneles que desvelan el lado más antiguo y defensivo de la ciudad. Perseguida por espías que desean la clave del pergamino, Meritxell emprende un viaje por mar hacia los puertos del Rosellón y la península itálica, donde la intriga involucra linajes nobiliarios, la diplomacia de la corte, las tensiones entre facciones urbanas y el pulso discreto de las grandes potencias mediterráneas. Entre sus aliados figuran nobles de motivaciones ambiguas, mercaderes ilustrados, marineros que conocen estrellas que no están en los mapas y figuras de la administración real aragonesa, inspiradas en instituciones y casas que dominaban la política catalana del siglo XIV, como los Cabrera, linaje al que pertenecía Bernardo IV de Cabrera, figura viva y activa en 1381 con influencia en campañas marítimas y la política de la Corona. Su sombra —y la del poder aragonés— recorre la narración como un recordatorio de que el destino de las ciudades a veces depende de secretos que nunca fueron escritos para ser leídos abiertamente. Cuando el cifrado se completa y el mensaje se revela, Meritxell comprende que su misión no es solo descifrar, sino decidir qué debe sobrevivir, qué debe arder con las pruebas y qué debe permanecer oculto para proteger no solo su vida, sino la memoria misma de Girona. Una novela de ficción histórica donde el arte de la miniatura, la cartografía medieval y la intriga política se funden en un relato épico sobre el legado, el poder y la verdad escondida en la piel más noble del conocimiento: el pergamino.